De los capítulos florales se extrae un aceite esencial rico en muchos principios activos que confieren a la planta acciones antiinflamatoria, antimicrobiana, carminativa, espasmolítica, antiulcerosa y ligeramente sedante. Es el primer remedio casero que se utiliza ante cualquier malestar digestivo, por lo que su uso está ampliamente extendido. Además, posee un principio activo amargo que le da a la planta actividad aperitiva, digestiva y colerética. En uso externo se suele emplear para tratar ojos irritados y cansados por el trabajo, el viento, las vigilias o el sol.Indicada en: gastritis, úlcera gastroduodenal, espasmos gastrointestinales, náuseas, vómitos, digestiones lentas, meteorismos, nerviosismo e insomnio de los niños. Uno de los principios activos de la planta, el
camazuleno , se utiliza hoy día en soluciones al 2% para combatir el asma bronquial de los niños, en inyección intramuscular.La forma más corriente de administrar la manzanilla es en infusión, que se prepara con media docena de cabezuelas por taza y administrándola lo más caliente posible, con o sin azúcar.
Elixir.
En 700 g. de agua se disuelven 800 g. de azúcar, calentándolo sin llegar a ebullición. En 200 g. de alcohol de 96 ºC se maceran durante 4 ó 5 días los siguientes compuestos: 100 g. de flores de manzanilla, 5 g. de corteza de naranja amarga y 2 g. de canela; se filtra el alcohol macerado y se añade al jarabe. Este elixir combate la excitación nerviosa y el insomnio.
Extracto fluido : 40-50 gotas, 3 veces al día.Infusión para compresas. Se empapan 2 compresas de algodón hidrófilo en una infusión de manzanilla y se aplica sobre los ojos durante un cuarto de hora.Infusión para enema. En un litro de agua hirviendo se vierte una cucharada de flores desecadas. Se deja templar el líquido, se filtra y se utiliza para enema.
Manzanilla
(Matricaria Chamomilla)